Pues algo así.
Lo que llegó fue una de las mejores bodas del verano.
El proyecto de este año que me ha tenido más ocupada, nerviosa e ilusionada ha sido la boda de Naira y Jorge.
Hoy os cuento un poquito y otro día continúo.
Fue una boda especial, pues a parte de clientes son amigos y nos encargamos de casi todo.
En la ceremonia se repartimos pai-pais para sofocar el calor, cantó la coral (precioso como siempre) y al salir teníamos preparados los saquitos de arroz que hicieron las hermanas de la novia.
Mirar que bonicos estaban.
Pues yo me lo pasé de maravilla, y estaba todo muy chulo y muy bueno...
ResponderEliminarJajajajajaja... si cariño doy fe de que te gustó todo, no dejaste nada en el plato y la foundee de chocolate se hizo super amiga tuya.
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